La superabundancia de minerales del agua de red se va incrustando y puede provocar un bloqueo en las tuberías. Puesto que la cal actúa como un aislante térmico, hace necesario utilizar más energía para calentarla. Por tanto, la eficacia de las calderas y tanques disminuye provocando un sobrecosto del 15 al 20 % en el gasto de electricidad.
También daña algunos electrodomésticos reduciendo considerablemente su vida útil. Algunos consumidores que no instalan descalcificadores se ven obligados a adquirir productos antical y, aún así, esta es una solución a medias, ya que sólo retrasa el deterioro de los equipos.
Por otra parte, el agua sin descalcificar hace que sea muy difícil obtener espuma con jabones y detergentes. De hecho, en las cajas de estos productos, se recomienda la cantidad necesaria para el lavado según la dureza del agua con la que se lave. Con 25º de dureza se necesita tres veces más jabón para lavar que con un agua ablandada.
La explicación de este fenómeno es que la cal y el magnesio forman sales insolubles con las moléculas orgánicas del jabón. Con aguas duras también resulta más difícil el proceso de enjuague, ya que las telas se impregnan con las sales insolubles precipitadas. La vajilla y la cristalería, así como sanitarios y azulejos también lucen más brillantes si se lavan con agua blanda, ya que desaparecen las manchas de cal.
Las ventajas de usar descalcificadores para la salud
La cal en la ducha reseca la piel e intensifica algunos síntomas de la piel atópica, lo que obliga a utilizar cremas suavizantes e hidratantes para minimizar picores y sequedad.
El cabello también se beneficia, con menos cantidad de cal se gasta menos en champú, acondicionadores y mascarillas. Además, el pelo queda más suelto y menos apelmazado y dura limpio más días.
Descalcificadores de bajo consumo: ahorro y eficiencia
La nueva tecnología permite a estos aparatos ser más eficientes. Los descalcificadores de bajo consumo son más caros que los tradicionales pero, al ser más pequeños, económicos y ecológicos, resultan más convenientes y poco a poco va imponiéndose su uso. Gastan un 60 % menos de agua y sal que un descalcificador tradicional.
En muchas zonas de España es necesario un descalcificador
Por el tipo de suelo, la dureza del agua en España depende de la zona, la cal es más común en las regiones del este y el sur. Cataluña, Aragón, Valencia, Murcia y la parte este de Castilla la mancha son las que tiene las aguas más duras. Por el otro lado, todo el norte, con Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra y La Rioja, así como Castilla León y parte de Extremadura tienen aguas más blandas.
¿Funcionan los sistemas de descalcificadores magnéticos?
Los descalcificadores magnéticos prometen solucionar el problema de la cal en los electrodomésticos y las tuberías con un desembolso menor. Pero, ¿funcionan estos sistemas de la misma manera que un descalcificador de sal?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado en un artículo los descalcificadores magnéticos para descubrir los falsos mitos que se usan como reclamo publicitario para venderlos. Ha llegado a la conclusión de que no mejoran de ninguna manera la calidad del agua del grifo ya que no es posible medir científicamente ningún cambio en las características del agua tratada. Es decir, que son productos sin base científica.
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