Como hemos visto en otros artículos los sistemas de ósmosis inversa necesitan un juego de filtos, también llamados prefiltros, situados antes de la membrana osmótica. Estos filtros preparan el agua para su paso por la membrana, a la que protegen de partículas grandes de materia y de químicos que podrían dañarla, como el cloro.
Estos filtros son el filtro de sedimentos y los filtros de carbón activado. En este artículo veremos más en profundidad qué es y cómo funciona un filtro de sedimentos.
Qué son los sedimentos
Los sedimentos son cualquier partícula de materia que pueda ser transportada por un fluído y que acaba depositándose en el fondo del líquido.
En el agua de red, estas partículas pueden ser arenilla, pequeñas partículas de materia orgánica, piezas de óxido de las tuberías, arcilla o cualquier otra pequeña partícula.
Si el agua tiene un gran nivel de sedimentos esto puede cambiar su apariencia y verse turbia. En el caso de agua que va a pasar por un sistema de ósmosis los sedimentos pueden causar problemas en el equipo, en la forma de atascos o daños a la membrana.
Qué tipos de filtros de sedimentos existen
Los filtros de sedimentos funcionan como un tamiz que no deja pasar estas partículas. Los prefilstros de sedimentos se categorizan según el tamaño de las partíulas que puede atrapar, medidos en micrómetros. Un micrómetro o micrón es una millonésiam parte de un metro. Un pelo humano, por ejemplo, tiene 70 micrones de diámetro.
El material del que están hechos estos prefiltros puede variar: entre los más comunes están el polipropileno, el poliéster, la celulosa, la cerámica, la fibra de vídrio, el algodón.
El papel del filtro de sedimentos en un sistema de ósmosis
Las ósmosis son sistemas que purifican el agua eliminando la mayor parte de elementos y contaminantes que se encuentran en disoclución. Ese trabajo es hecho principalmente por la membrana osmótica, que elimina un 90% de las partículas. Sin embargo, antes de llegar a la membrana el agua pasa por el filtros de carbón y el filtro de sedimentos que, cómo hemos indicado antes, eliminan aquello que podría dañar la membrana.
El prefiltro de sedimentos funciona reteniendo partículas en suspensión mayores de 5 micras. Pueden ser partículas de tierra o arcilla, materia orgánica, restos de una tubería gastada, óxido, etc. Los filtros de sedimentos no extraen del agua productos químicos o metales pesados.
Cambio de filtros y mantenimiento de la ósmosis
Laos filtros de carbón y sedimentos deben cambiarse cada 6 o 12 meses. De esta manera se protege la membrana, que solo debe cambiarse cada tres o cuatro años, en función del uso del equipo. Es importante hacer los cambios de filtros a tiempo, ya que el precio de los filtros es bajo, mientras que la membrana es la parte más cara del sistema.