Mantenimiento descalcificadores
Un descalcificador de agua retiene las sales de calcio y magnesio, popularmente llamadas cal, mediante un sistema de intercambio de iones. Esto sirve para evitar que la cal se deposite en las tuberías aumentando así tanto la vida útil como el rendimiento de los electrodomésticos y disminuyendo el gasto de energía. También ayuda a conseguir que se forme espuma más fácilmente y, por lo tanto, facilita la adecuada limpieza de la ropa.
Para que nuestro descalcificador doméstico funcione correctamente y se mantenga en buenas condiciones es necesario realizar su mantenimiento con cierta frecuencia.
Mantenimiento de descalcificadores: sal para descalcificadores y sanitización
- Comprobación del nivel de sal: el descalcificador utiliza sal para eliminar la cal del agua. Por eso, cada cierto tiempo hay que comprobar que el depósito del descalcificador contenga sal. Normalmente, un descalcificador estándar consumirá 12 sacos de sal al año. Sin embargo, los de bajo consumo suelen gastar en torno a 4 anualmente.
- Sanitización: es importante realizar una desinfección del equipo una vez al año para garantizar la salubridad del agua. Para llevar a cabo la higienización del equipo se introduce en el sistema una sustancia que funciona como bactericida que limpia la resina del equipo. Posteriormente se hace una regeneración del descalcificador que suele durar aproximadamente dos horas. Es importante llevar a cabo este proceso cada año para evitar que la carga de materia orgánica presente en las resinas retenga todo el cloro del agua de la red.
- Cambio del filtro de sedimentos. el filtro de sedimentos está situado en la tubería de entrada del descalcificador y retiene los sedimentos y partículas impidiendo así que estas pasen al equipo. Esto es importante ya que hay partes del descalcificador muy sensibles a la presencia de partículas. Este es el caso del ventouri, una pieza que realiza la succión de salmuera a través de un pequeño orificio. Si éste se ve obstruido el descalcificador deja de funcionar. Al igual que la sanitización, el cambio del filtro de sedimentos es recomendable realizarlo cada año.
- Análisis de la dureza del agua. por último, se analiza la dureza del agua para comprobar que el descalcificador está funcionando correctamente. Una dureza superior a 10ºF (grados franceses), puede indicar que el descalcificador se encuentra averiado.
¿Qué podemos hacer si nuestro descalcificador no funciona? Reparación de descalcificadores
Para comprobar que nuestro descalcificador funciona correctamente se pueden verificar una serie de indicadores:
- Comprobar consumo de sal: la manera más evidente y fácil de darse cuenta si nuestro descalcificador funciona es comprobando el consumo de sal. Si nuestro descalcificador no consume o consume menos sal de lo normal es muy probable que esté averiado.
- Comprobar la espuma que se produce con el jabón: si se produce menos espuma que usualmente con la misma cantidad de jabón es probable que haya cal en el agua y, por lo tanto, que el descalcificador no esté funcionando.
- Medir la dureza del agua: La dureza del agua se puede medir con un reactivo con solución A y B o con tiras reactivas.
Si nuestro descalcificador no está funcionando, debemos comprobar lo siguiente:
- Que haya sal en el equipo. Si no hubiera sal en el equipo, este no puede funcionar correctamente. Sin embargo, una vez que le añadamos sal la próxima vez que el equipo haga una regeneración se normalizará la situación.
- Comprobar que está enchufado.
- Verificar que el bypass esté en posición de servicio.
- Comprobar el caudal del agua. Si el caudal baja más de lo normal es recomendable poner el bypass y dejar el descalcificador fuera de servicio hasta la revisión de personal capacitado.
Si el mal funcionamiento del descalcificador no se debe a ninguna de estas causas puede haber un problema interno en el equipo, como por ejemplo que las juntas estén desgastadas, el ventouri obstruido o el motor roto. Ante esta situación es necesario llamar a un profesional.
¿Cómo funciona un descalcificador?
El proceso de descalcificación consta de diversas fases:
- Intercambio iónico. El descalcificador contiene unas resinas que tienen la capacidad química de retener los iones de calcio (Ca) y magnesio (Mg) que existen en el agua, conocidos popularmente como cal. La capacidad de retención de cal de la resina es limitada y para recuperar esta capacidad la resina se tiene que regenerar. El responsable de determinar cuándo se tiene que hacer una regeneración es el cabezal del equipo. En los equipos más antiguos el cabezal era cronométrico, es decir, se fijaba que la regeneración se hiciera varios días a la semana independientemente del consumo de agua. Sin embargo, en los equipos modernos volumétricos, se mide la cantidad de agua consumida y según esto se define el momento en que es adecuado hacer la regeneración.
- Regeneración. En este proceso la salmuera pasa por el tanque de resina expulsando la cal y enviándola al desagüe. De esta forma la resina recupera así su capacidad de descalcificación. Para que la resina no quede con restos de sal se aclara con agua.
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